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#61 La familia. Ni contigo ni sin ti

(El Día Internacional de la Familia se celebra el 15 de Mayo)

*Actualización 15-05-2016*

Hablar de la familia es un tema difícil de enfocar no solo por lo personal sino porque implica a otras personas importantes para mí. Yo decido lo que cuento o no de mis experiencias, pero ellos no tienen nada que ver con este espacio que comparto con vosotros.

Cada familia es un mundo. Las circunstancias de la nuestra (que son privadas) han hecho que estemos muy unidos y nos queramos mucho. Pero también hay amores que matan.
Mis padres han sido muy estrictos y había una gran disciplina en casa (hasta que llegaron los nietos). Y eran/son también muy "dramas".
A mi madre le gusta decir que he sido rebelde. Pero yo le respondo que "rebeldilla"; y al final lo dejo estar porque sé que acabaremos discutiendo por algo que ya ha quedado atrás.
La verdad es que creo que no saben lo que es tener hijos que realmente den problemas porque mi hermana y yo, por qué no decirlo, hemos sido buenas chicas. Con nuestras cosas de adolescentes, nuestros temas... pero no hemos sido conflictivas. Además hemos sacado nuestros estudios adelante, hemos trabajado en lo que ha salido y nos hemos emancipado en cuanto nos ha sido posible.
Quizás lo que pasa es que ellos venían de una época en la que a los padres se les hablaba de usted. Y se acataba lo que decían sin rechistar.
Y yo hacía lo que había que hacer. Pero no me callaba. Argumentaba todo lo que no me parecía bien.
Y chocaba mucho con ellos.
Con la edad todo ha mejorado porque cada uno en su casa y Dios en la de todos, permite ceder en ciertas cosas. Ellos no se meten en otras. Aunque también es cierto que el hecho de no tener hijos me ha facilitado el tema en ese sentido.
Pero mi "problema" parece ser que he sido siempre muy independiente y ansiaba libertad.
Qué capulla es la vida. 



Llegaron las enfermedades y en cuanto al apoyo... ha habido luces y sombras.
Muchos, muchos años de oscuridad, pero poco a poco ha ido aclarando y ya se está haciendo de día.
La verdad es que hasta 2008, aunque tenía fibromialgia (sin diagnosticar) yo no me encontraba mal. Quiero decir, que tuve que acostumbrarme al dolor y a hacer algunas cosas de otra manera. Pero no dejé que me limitara aunque lo intentó. Al contrario, era un persona tan activa que mi madre me decía que me faltaban horas en el día.
Y según se iban sumando síntomas me los echaba a la espalda (igual de ahí las contracturas recurrentes, con tanto peso encima...).
La cosa cambió con el Síndrome de Fatiga Crónica, desde entonces todo ha ido a peor (más síntomas, más diagnósticos, más deterioro...).
Y no saber lo que te pasa pero tener la certeza de que algo no está bien durante tanto tiempo es horrible. Porque entonces sí me sentí enferma y el mundo entero me decía que no había razón para ser una amargada (por no salir como antes), una vaga (por no hacer lo que antes) y una quejica (porque siempre tienes algo). Sí, así te ven.
Fueron años muy duros a los que prefiero no mirar si no es para tomarlos como referencia de lo que no quiero que vuelva.
Mi vida fue un caos en la que hacía malabares para que todo siguiera funcionando como hasta entonces. Y cuanto más me esforzaba, más platos se rompían.
Los diagnósticos en ese sentido no ayudaron mucho. No llegaban a entender. Y cada vez me volví más retraída. Porque cansa  dar tantas explicaciones a tanta gente cada día, y que no lleguen a hacerse una pequeña idea de por qué casi todo tiene un pero.
Y empiezan a dejarte fuera de planes, empiezan a decidir por ti...
Supongo que en algún momento se toca fondo y solo se puede subir.
Ni siquiera el diagnóstico de lupus sirvió al principio. De hecho, una amiga mía cuando se lo conté soltó "puf menos mal, me habías asustado" (porque creía que tenía cáncer).
A mi familia le ha costado muchísimo asimilar montones de cosas. A mí también me ha sido difícil abrirme, hablar y, sobretodo, poner límites a ciertas cosas.
Pero creo que el punto y aparte fueron las hospitalizaciones del 2014, especialmente la segunda.
Ha sido una vuelta de tuerca que ha puesto las cartas sobre la mesa. Y he tenido que tomar decisiones importantes y duras sobre mi futuro.
Y sentir que ahora sí tengo el apoyo de mi familia, cada uno a su manera, me da seguridad para hacerlo.
Tengo dos sobrinos que los quiero hasta decir basta. Y su tía hace cosas raras para que les afecte lo menos posible, como quitarse de en medio para que no vean ciertas cosas (como en el video), porque mi sobrina me mata cuando me pregunta si es que estoy mala. Están acostumbrados a encender la luz para dibujar porque la persiana está bajada, a que me quede en casa cuando bajan al parque para jugar juntos luego, a encontrarme tumbada en el sofá... pero se están haciendo mayores y en algún momento tendrán que saber que oficialmente su tía no es una amargada, una vaga ni una quejica. Está enferma.
Y por eso, entre otras cosas, estoy luchando.

PD: Hoy hace un año que mi hámster formó parte de mi familia, después de años sin animales en casa. Y es lo mejor que me ha podido pasar.
PD2: Murió en octubre del 2016 y a los meses se coló una gata en mi casa y mi vida.

Ilustración (editada): por Andrea Joseph 

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9 comentarios :

  1. Los niños de la familia son los que mejor comprenden sin ni siquiera saber qué te pasa. Mi sobrina también está acostumbrada a que la tita está cansada, a que la tita no vaya al parque, incluso se refiere al sofá como "El sofá de la tita" y, un día, me preparó un jarabe imaginario que me sirvió más que cualquier pastilla real. Ella no me juzga, si no puedo jugar con ella, va en busca de otros y ya está; otro día jugaremos. El resto de la familia creo que intenta no juzgarme tampoco, pero no lo logran tan bien como ella. Se que están ahí, se que me apoyan, que me intentan entender... y, en el fondo, eso es lo importante.

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    1. Totalmente de acuerdo contigo en lo uno y en lo otro.
      Yo tenía miedo de que mis sobrinos no me quisieran porque los tengo lejos y cuando nos vemos pues... eso, tenía miedo de ser la tita aburrida. Pero para nada. Son los niños más cariñosos del mundo; y como el jarabe imaginario fue para mí el corazón que me hizo mi sobrina corriendo antes de bajar al parque.

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  2. Duro tema el de la familia, a mi me duele muchísimo ver que las personas que más te quieren no son capaces de entender o de acercarse a mis zapatos.

    Exceptúo a mi marido, que le costó (posiblemente por mi culpa), pero consiguió ponerse en mi lugar después del diagnóstico

    Lo más que he conseguido es que mis padres acepten, más o menos, que mi vagancia, mi lentitud para tomar decisiones, mi estar agotada al final de la tarde... a lo mejor no son mi culpa, sino de una enfermedad.

    Y me duele mucho porque sé que me quieren y veo que se preocupan, pero a veces sus caras aún dicen algo que...

    Me gusta como has enfocado el tema.
    Un abrazote, Cleo

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    1. Es un tema muy duro y que me ha afectado durante muchos años. Por suerte al leer sobre fibromialgia y SFC, encontré a menudo el handicap de la familia y amigos. Y aprendí a "perdonar" a los que quedaron, o al menos dejar atrás ciertas cosas.
      Tampoco sé cómo habría reaccionado yo, pero me gusta pensar que la empatía que he utilizado siempre en el trabajo sabría llevarla a lo personal y al cambio de otra persona cercana a mí.
      Pero en fin, ahora las cosas van mejor en ese sentido. Y me alegra mucho que tu marido esté a tu lado después de todo. Para nosotros tampoco es fácil hacernos entender. Lo vemos tan evidente, que no sabemos por qué tenemos que explicar tantas cosas que son difíciles poner en palabras.
      ¡Besos!

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  3. Gran tema, la familia, y complicado también.
    Creo que con el título lo dice todo, ni contigo ni sin ti.
    No puedo quejarme, porque también por situación vividas, estamos muy unidos, siempre lo digo, no se que haría sin mis padres.
    Pero si que es verdad que duele ver como, por más que lo intenten, no te comprenden, incluso se molestan de tu estado...
    Mi madre me insiste en que tenga otro niño y en que no espere mucho, y es que ya ni contesto, porque pienso, pero no me ve? No ve que no puedo ni con uno? Ya no me molesto en argumentar nada, porque aquí es donde veo que ni ella me entiende.
    Siéntete orgullosa, a pesar de aquella mala época, has conseguido llevar las cosas como debes, sabes decir no, y aceptas tus limites, llevas la vida que quieres dentro de las posibilidades que tienes.
    Cada vez me gustan mas tus post!
    Un beso campeona!!!

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    1. Muchas gracias Sonia <3
      Sí, es muy complicado. A nosotros nos ha llevado mucho y aunque las cosas no sean perfectas ¿cuándo lo son? Ahora tengo más apoyo, puedo hablar con ellos y cuando no entienden, tomo las decisiones que tenga que tomar anteponiendo mi salud a todo lo demás. Porque todos somos mayores para ser responsables de nuestros propios sentimientos.
      Un besazo ¡y ni quiero oirte hablar de embarazo por si acaso! Ö

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  4. Tema escabroso donde los haya cuando tienes una enfermedad, y más cuando es invisible...
    Al principio les cuesta mucho entender qué es lo que le pasa a una, y creo que nunca acaban de entenderlo del todo, como que a veces se les olvida... Tampoco se les puede culpar, al menos lo intentan y nos debemos quedar con eso, aunque nos gustaría que fuese de otro modo, claro... Pero creo que hay que quedarse con lo positivo de cada caso...
    Aunque a veces den ganas de mandarlos a freir espárragos! jajaja!!

    Un abrazo mi divah!! ;)

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    1. Ay Ana, no puedo decirte nada más porque lo has dicho todo. Mira si se les olvida que mi padre aún me pregunta qué me ha salido en la cara (cuando tengo la "mariposa") y sigue diciéndome de ir a la playa (estando en casa en penumbra) e_e y ¿qué hago? ¿lo mato? jajaja
      Pero en ellos he visto un gran cambio y eso lo valoro muchísimo, porque nos ha llevado muchísimos años.
      Un besazo :*

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    2. Jajaja ay q gracia!
      Pues no, no podemos hacer mas que reírnos y tomárnoslo a bien....

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Imagen diccionario: Dani Torrent